Torrecilla en Cameros

Este municipio riojano es la capital de la comarca de Tierra de Cameros, situado en ambas orillas del río Iregua bajo las cumbres del Serradero pertenecientes a la sierra de Camero Nuevo, está situada a 774 metros sobre el nivel del mar.

Durante siglos su importancia se debió a la gran cabaña de ganado ovino y la industria textil que esta generaba, eran los años de la Mesta con la explotación lanera de la oveja merina. En el siglo XVII existían en el pueblo 13.000 cabezas de ganado lanar dedicado a la trashumancia, que dos siglos más tarde, a mediados del XIX, daban trabajo a 9 fábricas de paños cuando la población era de unos 2.000 habitantes, pero con la caída de esta industria y la desaparición de otra dedicada al sector del mueble en los años 60 del siglo XX, han hecho que la población actual no llegue a los 500 habitantes.

Poblada desde antiguo por los Berones y desploblada durante la invasión árabe de la península en el siglo VIII, se repobló durante la reconquista con vascones, castellanos y navarros. Siglos más tarde, en el reinado de Carlos I (el emperador Carlos V) se fundó la Hermandad de las Trece Villas para aprovechar los pastos del terreno comunal de la comarca.

La importancia de Torrecilla en Cameros se ha debido a su situación estratégica en el centro de La Rioja. En los años de esplendor y el gran desarrollo económico generado por la enorme cabaña de oveja merina, se asentaron en el lugar los miembros de la nobleza comarcal donde construyeron mansiones y casonas solariegas, además de otros edificios religiosos, que aun perduran. En sus calles podemos visitar la iglesia parroquial de San Martín, del siglo XVI; la iglesia de Nuestra Señora de las Vegas, del mismo siglo, que se encuentra en ruinas; la ermita de San Andrés, del siglo IX, recientemente restaurada; la ermita de San Antón, del siglo XIV, junto a una efigie del Sagrado Corazón de Jesús; la ermita de San Lázaro y el palacio del conde de Superunda, entre otros.

En la actualidad, aunque todavía persisten algunas cabezas de ganado ovino, como puede apreciarse en una de las fotografías, la actividad económica ha cambiado a la ganadería bovina por ser más rentable. De ser un municipio eminentemente agrícola y ganadero ha pasado a ser un pueblo turístico y de veraneo como segunda residencia de los riojanos.

Cuando nos acercamos desde Logroño, antes de entrar en la localidad, se encuentra el manantial Riva de Baños, llamado actualmente de Peñaclara, lugar donde se ha instalado una industria envasadora que desde 1974 comercializa el agua mineral con el nombre de Peñaclara.

Uno de los personajes ilustres de la localidad es el político Práxedes Mateo Sagasta, nacido en 1825, que fue presidente del Gobierno de la nación en el último cuarto del siglo XIX, a cuya memoria podemos apreciar algunos bustos y placas.